Desarrollé la dirección de arte y dirección creativa del videoclip, construyendo una narrativa visual que evoluciona junto con la canción. Conceptualicé el uso de un televisor como elemento simbólico central, el cual transforma el espacio y la atmósfera del estudio conforme avanza la pieza.
Diseñé la progresión visual del proyecto mediante cambios de color, ritmo y uso de cámara lenta, integrando la caída de confeti plateado como representación simbólica de las estrellas y del clímax emocional de la canción. Dirigí el storyboard, la puesta en escena y la lógica visual de la desaparición progresiva de los integrantes, quienes son absorbidos por el televisor, culminando con un cierre simbólico donde el espacio queda vacío y la banda existe únicamente dentro de la pantalla.
Estuve a cargo de la dirección, producción y postproducción, asegurando coherencia estética, narrativa y emocional en todas las etapas del proyecto, así como el ritmo visual y la construcción del mensaje final.

Actualmente cuenta con 77.566 visualizaciones desde su estreno en mayo del 2025.